A partir de la 8º semana de gestación, podemos conocer el sexo de un bebé. Es una prueba sencilla, sin riesgos y con una fiabilidad del 99%.
Antes había que esperar a partir de la semana 15 de embarazo para poder conocer el sexo del bebé mediante una ecografía e incluso a veces no había seguridad en la imagen.
Hoy día se puede saber el sexo de su bebé con un simple análisis de sangre de la madre, donde se encuentra material genético del niño, lo que se conoce como ADN fetal libre. El análisis consiste en la detección de secuencias de ADN.
En caso de embarazos gemelares, la eficacia de este test disminuye.
¿Niño o
Niña?